El primer gran error que se repite una y otra vez es confiar solamente en nuestra motivación para ser constantes. Es decir, no ver a la constancia como un hábito que hay que cultivar y desarrollar. No, ¡ser constante no es un superpoder! Como siempre, es una cuestión de hábitos. Y hasta de hábitos que pueden parecer completamente ridículos. ¿Te doy una pista? Solo te llevará 15 minutos por día. El otro gran error es depender enteramente de nosotros mismos cuando estamos bloqueados. Casi siempre subestimamos el poder de tener apoyo externo a la hora de ser constantes al emprender. Cuando te encuentras trabado o bloqueado, casi siempre encontrarás la manera de seguir adelante utilizando la experiencia de alguien más. Hoy puedes utilizar la nuestra para aprender cómo ser constante cuando sientas que no puedes avanzar más. En el episodio de hoy conversamos sobre qué hábitos cultivar para ser constantes al emprender.